Discurso presidente saliente
Gestión 2021-2023

Raquel Cors Ulloa

Interpretaciones

Queridos colegas,

Contenta y agradecida –junto a cada uno de los psicoanalistas que me acompañaron durante este trayecto como presidente de la NELcf–, concluyo.

Como ustedes saben, con una sola vuelta, de un solo ciclo, la experiencia de Escuela no se aborda como el clásico punto finito de la concepción lineal que va del 0 al 1. Hay finales, en plural y hay momentos lógicos en singular. Es por esto que hoy celebramos el espíritu de la permutación, que Jacques-Alain Miller recordaba recién a propósito de la presentación del libro "El nacimiento del Campo freudiano", cuando dice: "He logrado introducir una novedad en la vida institucional, la novedad era la permutación.[…] La palabra permutación figura en el Acto fundacional de Lacan, pero solamente a nivel de los carteles […] Yo, tomé la palabra permutación, y logré convencer a todo el mundo que la permutación era la ley de la Escuela, de tal manera que fue adoptado un régimen vigente en todas las Escuelas del Cf. […] Si tenemos una paz institucional en las Escuelas, eso se debe en mi opinión a la práctica de la permutación que, da una respiración"[1].

La Escuela no se cierra en un concepto

La Escuela, en tanto concepto, no se cierra, se renueva, según las interpretaciones. El momento del saber supuesto y el modo del saber expuesto desde donde provienen esas interpretaciones –que, de hecho, en 1973 Lacan define como una traducción, articulación, que siempre implica una pérdida–, eso, siempre estará en la Escuela del lado de sus miembros, del análisis y de la práctica. Las interpretaciones, esos instantes memorables, están demostrando por qué la historia del psicoanálisis está en el futuro.

Como enseñan los análisis, en la vida de la Escuela hay un instante de ver y un tiempo para comprender el recorrido de las significaciones que marcaron nuestro destino. La Escuela sujeto que habitamos, la NELcf, "está para ser interpretada –pues la vida de Escuela–, es interpretable analíticamente"[2]. De hecho, "Cortes e interpretaciones" es precisamente lo que recién hemos comenzado a releer a partir del tema propuesto por Miller para nuestras XIII Jornadas, aquí en Lima.

En consecuencia…

La NELcf es la Escuela que, desde mis primeros pasos en la permanente formación analítica que ella dispensa, ha alojado, in situ, mi deseo.

Quién lo diría, que un encuentro de 1992 con el psicoanálisis de orientación lacaniana y un encuentro del año 2000 con Jacques-Alain Miller en persona, cambiarían mi rumbo. Ese año, en una reunión institucional a la que fui generosamente convocada para asistir como adherente del Campo freudiano, me acerqué a Miller para pedirle la dedicatoria de un libro que acababa de publicarse, se trataba de su Curso "El banquete de los analistas". Ese día, en el entonces local de la EOL, estaban reunidos no solo una pirámide de libros, sino una veintena de psicoanalistas que debatían acaloradamente, entre ellos, algunos célebres colegas de la Escuela del Campo freudiano de Caracas. Yo era una joven con menos de 30 años, que no tenía ni la menor idea de lo que el futuro incierto depararía para mi deseo de saber.

Pero hoy no estamos aquí para escuchar mis hystorias… Voy al grano, y sin rodeos, para sumergirnos en algunas consecuencias que el amor de transferencia y la transferencia de trabajo causaron, para que a modo de una carta femenina, comparta hoy con ustedes, no tanto una lista de lo hecho durante estos casi 3 años de gestión como presidente de la NELcf, sino las consecuencias de un trayecto por la vida de la Escuela, con la AMP, que animó en cada momento, la presencia y participación del Consejo, no sin la confianza de los miembros que han consentido a esta agalmática experiencia.

Una causa de la ignorancia que nos anima

El sujeto de deseo NELcf, con sus 23 años de historia, y desde la aún reciente inscripción que atañe a su existencia como sujeto de derecho, experimenta, y no sin sorpresa, algunos retornos de su travesía. El objeto en cuestión, de ¿cómo se autoriza cada uno a la hora de confiar en la extimidad y las instancias de turno?, ha sido para el Consejo de la Escuela que tuve el honor de presidir hasta hoy, una causa de la ignorancia que nos anima. La relación de cada psicoanalista-analizante en su lazo con el Otro, seguirá siendo una Cuestión de Escuela, pues sin Otro no hay interpretación y de la interpretación sólo se sabe por sus consecuencias.

En algunas de las 117 reuniones del Consejo, nos hemos escuchado –en medio del camino– decir que estamos en un momento de "transición", que ya veremos –de aquí a unos años–, si habrá efectos de esta especie de reforma. Como en todo camino, hubo obstáculos, huesos duros de roer, que preocuparon y ocuparon a movilizarnos en busca de la buena salida.

Ahora, mientras escribía estas líneas, entendí en après-coup, por qué "se hace camino al andar". Y es que la NELcf ya no es la misma, ni el camino es el mismo, ni nosotros somos los mismos… "Caminante no hay camino"[3], el porvenir del psicoanálisis que se hace en los 9 países que hoy conforman la NELcf, dependerá del rejuvenecimiento del deseo del analista en cada uno de los miembros que la conforman.

Práctica de la interpretación

La Nueva Escuela Lacaniana del Campo freudiano tiene una marca de nacimiento, está en su nombre: "Nueva". Esta Escuela, que se renueva, está consintiendo a lo nuevo de una interpretación, pues: "Todo recomienza sin ser destruido para llevarlo a un nivel superior".[4] Y como no hay la última palabra para significar lo nuevo, sólo nos queda la práctica de la interpretación, para que ella se renueve, es necesaria la presencia del analista, de su discurso.

Algunos pasos

Los pasos durante esta gestión –de enero 2021 a noviembre 2023– en la NELcf, no han sido progresivos; esa idea del progreso no es aquí un imperativo.

Hemos dado algunos pasos: unas veces con tenacidad férrea hacia adelante, otras veces divididos, recalculando un paso hacia atrás y, cuando hubo que hacer una pausa, o se requirió ser prudentes y no precipitarnos, hemos maniobrado con docilidad al costado de lo real.

Como habrán leído en los casi 20 informes que recibieron por la lista NELcf-Miembros, más de 50 colegas –miembros, asociados y participantes de la vida de una Escuela de analizantes– han trabajado en transferencia, haciendo funcionar una enorme maquinaria analítica y política. No me alcanzan ni tengo las palabras para agradecer a cada uno por su compañía en esta soledad no solitaria y por su singular "sí" a cada requerimiento de la Escuela, sin que ella sea vivida como una Demanda.

Durante casi 3 años, y a pesar de una pandemia, nos reunimos con el Consejo cada lunes entre 3 y 5 horas. Mis queridos colegas del Directorio ampliado inventaron un lazo transversal que agilizó su independencia en el camino. Los Directorios de las 13 Secciones se las tuvieron que arreglar con una modalidad de trabajo a la que aposté: había que asumir que el Otro no es el Uno, para que la responsabilidad de cada síntoma local sea formalizada. Los efectos de soltura –como enseña la política de la dirección de la cura– no se hicieron esperar: llamadas a cualquier hora del día o de la noche, transmitiendo alegrías, angustias, afectos o pasiones, me permitieron constatar que cuando los acontecimientos imprevistos saltan, toca mover el cuerpo y muchas veces viajar para estar en presencia junto a los colegas que habitamos en el país del psicoanálisis.

Y bueno, sigamos, que aún hay mucho por hacer por parte de los que hoy, en la permutación se integran a un Consejo que se renueva. Los que salimos, dejamos a su consideración las Cartas del Consejo-Puntos vivos. También la invención y el primer tramo de lo que podrán hacer desde cada Comunidad-País. Quedan sobre la mesa, y siempre para repensar con espíritu renovado los momentos del Pase y la Garantía. Así también, deseo que siga la consolidación de El seminario de la NELcf, que fue instaurado por gestiones de los Comité Ejecutivos precedentes. Y por supuesto, la vuelta, el regreso al encuentro presencial, al menos una vez al año durante nuestras Jornadas. Ya se verá y leerá qué efectos trae el I Congreso de miembros, el tema que toca al Régimen del saber y sus impasses en la NELcf ¡no puede ser más provocador! Por su parte, quedan para retomar las resonancias del trabajo de las Tétradas y la conversaciones permanentes que han sido las Mañanas del Consejo. Por otra parte, tuvimos la ocasión de participar en el Consejo de la FAPOL, que hace posible conversar sobre los asuntos que conciernen en la diversidad de cada Escuela de América (EOL, EBP y NELcf). Del lado del Instituto, y gracias al excelente trabajo de la gestión saliente del INES, hay frutos para lo que sigue. La topología del mapa de la NELcf, queda como una apuesta para su reconfiguración.

En estos casi 3 años, hemos tenido momentos tristes por la pérdida de colegas que fallecieron, y otros que renunciaron. Pero también tuvimos momentos de celebración y alegría por las homologaciones de la AMP a las admisiones propuestas por el Consejo de la NELcf, un proceso que ahora seguimos, esta vez con la frescura de "La Nueva Política de Juventud".

De hecho, hemos constatado un deseo presente a través del creciente número de solicitudes de admisión, deseo que señala la importancia analítica y política para un crecimiento en la renovación de la Escuela.

Una interpretación

Durante una reunión, se me señaló cierta "docilidad" y "obediencia". No sin efectos subjetivos, entonces me interrogué si no habría ahí algún resto del análisis, pues trauma no hay otro: somos hijos del malentendido[5]. Entonces llamé a otros, pocos pero queridos y queridas colegas amigas, a quienes cada tanto llamo porque su voz me interpreta. Son momentos que una se escucha su propio mensaje: no se trata de obediencia o desobediencia, sino de transferencia, del inconsciente, y su reformulación.

Para Lacan, que no da órdenes a nadie, "toda política reposa en que todo el mundo está demasiado contento al tener alguien que le diga Hacia delante, marchen – no importa hacia dónde".[6] Por fortuna que, la interpretación que dispensa la Escuela, no son ya esas palabras que –en su imperativo–, habría que obedecer.

Lo que nos junta de alguna manera indecible pero no ilegible

En fin, son tantas las enseñanzas que la política, no sin la clínica y la práctica, que esta memorable experiencia me deja, que ahora sólo deseo abrazar y agradecer a todos, pero ¡no hay la última palabra para nombrar a todos!

Concluyo con un regalo para la próxima gestión, que entrego a Ana Viganó, nuestra nueva presidente. Dicen que los regalos llevan algo de un deseo: por eso, quizá elegí este objeto topológico férreo pero también dócil frente a los imposible. Es un cross cap donde hay una continuidad entre dos dimensiones distintas pero que no se cortan, se transforman.

¡Que la Escuela renazca con un estilo singular!

Lima, 3 de noviembre de 2023